- Las obras comenzarán este otoño y se enmarcan en el proyecto europeo Green Gap, que lidera Galicia, para el impulso de las infraestructuras verdes en el espacio transfronterizo.
- Ángeles Vázquez explica que las actuaciones beneficiarán a los ayuntamientos de Tomiño, A Guarda y O Rosal, incluyendo la rehabilitación de dos observatorios ornitológicos y de una pasarela, la eliminación de especies alóctonas y la renovación de la cartelería.
- Subraya que este es uno de los siete proyectos piloto que se prevé llevar a cabo en el marco de este proyecto de cooperación en la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal.
La Xunta de Galicia invertirá cerca de 200.000 euros en la ejecución de un conjunto de actuaciones, entre este año y lo que viene, con el objetivo común de mejorar los valores diferenciales y la resiliencia ante lo cambio climático del paisaje transfronterizo del estuario del Miño-Santa Tegra.
Así lo explicó esta mañana a conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez, durante una visita al observatorio de aves de la Xunqueira, que precisamente será rehabilitado así como la pasarela que le da acceso en el marco de las obras proyectadas en el entorno del corredor ecológico del río Miño.
Con un plazo de ejecución de 14 meses, las actuaciones sobre el terreno comenzarán este otoño, previsiblemente en el mes de octubre, y se enmarcan en el proyecto europeo Green Gap, una iniciativa liderada por Galicia a través del Instituto de Estudios del Territorio (IET) y en la que colaboran un conjunto de entidades locales, administraciones supramunicipales y entidades universitarias de la Eurorregión Galicia-Norte de Portugal para impulsar las infraestructuras verdes dentro del espacio transfronterizo.
Entre las actuaciones previstas, que beneficiarán también a los ayuntamientos de Tomiño y O Rosal, la responsable autonómica destacó la recuperación del observatorio ornitológico de la Pasaxe, localizado en la Guarda y que en este caso supondrá una reconstrucción integral.
Además, explicó que se llevarán a cabo labores de desbroce y eliminación de especies alóctonas en los tres municipios (como la acacia o la hierba de la boquiabierta); se mejorará la cartelería y la señalización para optimizar la información a los visitantes; se recuperarán cierres y otros elementos protectores sobre hábitats sensibles; y se retirarán elementos abandonados o árboles muertos.
Acompañada por el director del IET, Enrique de Salvador, la conselleira aprovechó la visita a la zona para subrayar la importancia de apostar por la implantación y el desarrollo en la Eurorregión de proyectos de infraestructura verde, ya que contribuyen a crear una red de espacios y elementos que mejoren la resistencia frente al cambio climático, contribuyan a la conservación de la biodiversidad y beneficien a la vez a las poblaciones vecinas.
Este es el objetivo principal con el que Galicia y el Norte de Portugal comenzaron a trabajar de la mano el año pasado a través del Green Gap, con un presupuesto de 2,1 millones de euros financiados a través del programa europeo Interreg España-Portugal 2021-2027.
De hecho, las actuaciones presentadas esta mañana para la zona del bajo Miño corresponden al primero de los siete proyectos piloto que se ejecutarán en el marco de esta iniciativa transfronteriza, tres de los cuales se desarrollarán en territorio gallego, siendo los otros dos un proyecto de restauración ambiental en el entorno del embalse das Conchas, en Muíños, y otro destinado a la creación de bandas de vegetación autóctona de masas forestales continuas en montes vecinales de Pontevedra.
